Enclavado a orillas del lago junto al que ha crecido desde hace más de 30.000 años, Bornos está declarada Conjunto Histórico. El paso de la cultura íbera a la romana se aprecia en los restos del yacimiento de Carissa Aurelia, a escasos kilómetros del núcleo urbano.

Como edificios relevantes de su arquitectura civil, además de su castillo, figuran las casas señoriales de la Cilla (s.  VII-XVIII) y de los Ordóñez (s. XVIII) y el Colegio y Hospital de la Sangre. Tiene también una magnífica muestra religiosa, con la Iglesia Parroquial de Santo Domingo de Guzmán, el Convento del Corpus Christi y el Monasterio de los Jerónimos, ambos del s. XVI. Las sierras cercanas a Bornos resultan idóneas para la práctica del senderismo, trekking, rutas a caballo y bicicletas de montaña.

Y en el Embalse de Bornos además de pescar el visitante podrá observar aves acuáticas.